jueves, 19 de junio de 2008

Un café compartido


Hacía días que no sabía nada de Él. He pensado muchas veces en llamarle, pero....para qué? qué le digo? o peor aún, qué me dirá Él? Entonces me vienen a la mente los útimos encuentros y llamadas, donde la comunicación y la complicidad brillaban por su ausencia. Me viene a la mente la última vez que nos vimos.....casi como si no nos conociéramos, personas anónimas que se saludan por pura inercia.

Mañana se celebra una comida, a la que me acaba de decir que posiblemente irá al café. Curiosamente nos hemos encontrado donde no pensaba encontrarle. Dudé si entrar en el chat, porque sabía que Él estaba, pero como veces anteriores, las ganas de almenos saludarlo me pueden.

Lo he notado algo triste, apagado, desilusionado quizás. Le he dicho que me preocupaba, y le he preguntado si estaba bien. Pero como siempre, es difícil pasar ese muro, y sin su ayuda ni las herramientas adecuadas se convierte en imposible.

Se va, marcha, desaparece.
No sé a dónde, ni hasta cuando ni porqué, pero desaparece.

Vuelvo a llorar, y me sorprendo. Pensé que ya no lo haría, no por Él. Me he imaginado de repente sin saber absolutamente nada, sin notícias suyas y no me he podido contener.

En el fondo no creo que haya cambiado nada; sigo sin entender su rechazo, y sigo poniéndome nerviosa con sólo ver su nick en algún sitio.

Esta misma tarde, charlando con una amiga, ésta me comentaba que me quería presentar a unos cuantos Doms amigos suyos y que seguramente alguno me gustaría. A todos les he encontrado alguna pega, alguna excusa para descartarlos sin nisiquiera conocerlos.
Muy mal por mi parte, seguramente me estoy perdiendo conocer gente maravillosa, incluso, quién sabe, si a mi primer Amo. Alguien que realmente quiera estar conmigo y disfrutarme.
Pero recuerdo esa sensación aquel mediodía, ese dolor en el estómago de nervios, ese subidón de colores, esa hasta entonces desconocida sensación....

Mañana alomejor los astros se alinean y tomamos café, compartido con todos los demás. O quizás ese café quede pendiente para siempre, acompañando a "la conversación" en el espacio infinito in eternum.

Por si acaso, mañana intentaré sacar mi mejor sonrisa y escoger algo de ropa para parecerle mínimamente atractiva, ya que no me quedan más armas con las que luchar.

uy! si mañana ya es hoy! qué nerviossssss....

No hay comentarios: