domingo, 13 de enero de 2013

Roma tendrá que esperar




Encara et plorem tots dos, petit tresor; no t´oblidem pas.
Dorm tranquil.la, Athenea.





Sumar renuncias y añadir años.  
Coleccionar huecos vacíos, provocar huídas, recolectar deseos ajenos. Adoptar la Neutralidad como prenda de vestir básica. Comprar necesidades inservibles, deletrear Indiferencia casi a diario. Almacenar peso muerto. Soñar buenas intenciones,  hacer dieta de impulsos y pasiones, dosificar cualquier cosa por ser desconocida. Limitar el crecimiento de lo agradable para ignorar lo que evito. Mutilar los instintos en pos del deber. Desoir las pulsaciones y acallar las manos y el tacto, por respeto a los gobernantes de la mayoría de las horas semanales. Pecar de incauta por parecer ingenua, acusada de des-atrevimiento por pecar de sorda.

Cualquier opción sirve mientras haya opción.
Pero incluso las opciones se agotan, he dejado de fabricarlas por sucumbir a la desgana.

Roma tendrá que esperar a que algo más fuerte que la realidad me despierte. 
Roma tendrá que aceptarme con años y renuncias.
Roma tendrá que esperar a que me la invente.